El robo de motos y la venta de repuestos de rodados ilegales fue el tema que reunió al intendente Miguel Lifschitz y al ministro de Seguridad provincial, Daniel Cuenca, a un encuentro en el que decidieron reforzar los controles de tránsito y de documentación.

En contacto con Radio 2, Cuenca advirtió sobre la presencia en la zona de “desarmaderos” y observó: “Llevarse una moto significa que hay un comprador de repuestos y motos de dudosa procedencia. Hay que hacer un llamado a la ciudadanía, porque si los repuestos ilegales se venden es porque hay particulares que compran, que son cómplices”.

“Detrás de una moto de este tipo está la posibilidad de una tragedia”, destacó el funcionario. “El desguace de motos da lugar al negocio ilegal es por eso que llamamos a las concesionarias”, agregó.

Luego, señaló que la Municipalidad de Rosario reforzará los operativos de infracciones de tránsito y la provincia irá por el control de la documentación de este tipo de vehículos.