Peligro, aclacrán. Llega el verano y en el departamento de Toxicología del Hospital Provincial, centro de salud de rerefencia sobre el tema, se multiplican los llamados por la aparición de alacranes en los hogares rosarinos.
En diálogo con el programa Diez puntos, de Radio 2, Silvia Martínez, a cargo del departamento en el Hospital Provincial, sostuvo que prácticamente no pasa un día en que no llame alguien para consultar sobre el tema.
En general dijo que los llamados son, en su mayoría, porque es picado un adulto. Una suerte si se tiene en cuenta que la cuestión puede adquirir gravedad si el afectado es un niño.
El grupo de riesgo, explicó la profesional, está compuesto por los niños menores de 10 años y de bajo peso, hasta 30 kilos.
Es que si el picado es un adulto, sólo produce ardor o dolor en la zona afectada, que se va en unas horas. En cambio, a los chicos, hay que ponerlos en observación en la guardia del hospital y en caso de presentar síntomas como vómitos repetidos y aumento de las secreciones, hay que aplicar un antídoto.
Martínez recomendó como prevención poner tela metálica en rejillas, burletes en ventanas y, cuando uno se levanta al baño y no hay luz, usar algún tipo de calzado. La fumigación, aclaró, no es muy efectiva. “Sólo puede alejarlos un poco”, afrmó.
