Una pesadilla es lo que vivió Newell’s este sábado en Bahía Blanca. La idea era no perder; si se ganaba, mejor. Y parecía que la Lepra se llevaba un punto que al menos le servía para seguir arriba de Olimpo en los promedios, pero el último minuto del partido fue fatal: error defensivo, gol del local, y el equipo rosarino más hundido que nunca, ahora en zona de descenso directo.

El Rojinegro, que sólo suma un punto en condición de visitante –producto de aquel empate ante Tigre–, perdió 1-0 por el gol de Matute Morales cuando el partido en el Roberto Carminati se moría y quedó penúltimo en la tabla fantasma, sólo por encima de San Martín de San Juan.

La Lepra tomó la iniciativa de entrada y, en un partido que se planteó luchado, tuvo las primeras situaciones. Sin ser mucho más, dominó casi todo el primer tiempo y pudo haber quebrado el cero pero careció de puntería.

Antes de que se cumpla un minuto de juego, los de Caruso Lombardi llegaron con una pelota en profundidad para Pablo Vázquez, pero el arquero Leonardo Cauterucchi llegó antes a la pelota.

Al rato, Santiago Salcedo, el otro delantero del equipo rosarino, probó desde lejos, y otra vez encontró atento al uno bahiense.

Más tarde, en un equipo adelantado, también llegaron al arco rival Cristian Ansaldi y Adrián Lucero, pero sus remates se fueron desviados. Para ese entonces, Caruso ya había mandado a la cancha a Héctor Gaitán por el lesionado Augusto Mainguyague.

Pero Olimpo se despertó cuando el primer tiempo entraba a su epílogo y se hacía presente la lluvia en Bahía: a los 39, el Chamagol González quedó mano a mano con Marcos Gutiérrez pero el Anguila, que fue titular por Justo Villar, tapó de manera brillante.

En el complemento, el local niveló las acciones y transformó en figura a Gutiérrez, pese a que la primera de esa etapa la volvió a tener Salcedo, pero el paraguayo se la bajó a Pablo Pérez en lugar de definir él y el Pitu la tiró por arriba del travesaño.

Después llegaría el momento para que se luzca el Anguila, esta vez ante Martín Wagner, a quien atoró con todo el cuerpo y le tapó el tiro. Y al rato frente a Josemir Lujambio, que se la picó, pero el arquero reaccionó de buena forma para evitar el gol.

Pérez contestó, en la última jugada antes de ser reemplazado, con un fuerte remate que salió apenas afuera, en la más clara para Newell’s en mucho tiempo.

La Lepra comenzaba a conformarse con el negocio de la igualdad fuera de casa y el partido se conducía, parecía, a un empate clavado. Pero la última jugada, un centro del ex leproso Carlos Araujo que no parecía peligroso le jugó una mala pasada a Gaitán y le quedó a Matute para el gol.

El defensor rojinegro talvez pensó, sin tener en cuenta que la lluvia que caía había afectado el suelo, que la pelota picaría bien, pero esto no ocurrió y el Negro pifió. Y Morales, con toda su experiencia, ajustició a Gutiérrez para el delirio de la gente bahiense, que se quedó cantando bajo la lluvia y festejando la salida de la zona de descenso directo, donde mandó a Newell’s.

Síntesis

Olimpo: Leonardo Cauterucchi; Carlos Araujo, Federico Mancinelli, Salustiano Candia y Sebastián Dubarbier; Gustavo Pinto, Rogelio Martínez, Martín Wagner, Angel Morales; Josemir Lujambio y Sebastián González. DT: Roberto Saporiti.

Newell’s Old Boys: Marcos Gutiérrez; Augusto Mainguyague, Rolando Schiavi, Germán Ré y Cristian Ansaldi; Pablo Pérez, Martín Seri, Matías Donnet o Hernán Bernardello y Adrián Lucero; Pablo Vázquez y Santiago Salcedo. DT: Ricardo Caruso Lombardi.

Goles: 47’ST Angel A. Morales (O)

Cambios: 26’PT Héctor Gaitán por Augusto Mainguyague, 21’ST Damian Steinert por Pablo Vazquez, 28’ST Leandro González por Sebastian González, 33’ST Matías Donnet por Pablo Pérez

Amonestados: 15’ST Gustavo Pinto (O), 38’ST Hernán Bernardello (N)

Estadio: Roberto Carminati (Olimpo)

Árbitro: Javier Collado