Vale mucho. Quizás más que la simple valía que cualquier empate pueda tener. Porque esta noche, Newell’s logró una igualdad en un reducto difícil y ante un rival que lo complicó, que le permite seguir siendo líder e invicto del torneo Inicial ya superada la fecha 11. Nada para despreciar, sobre todo si se analiza todo lo que pasó en Cilindro.

La Lepra fue más que la Academia en el primer tiempo, mientras que en el complemento el nivel del juego bajó y subió la performance del local, que tuvo varias ocasiones para ganarlo. De hecho, el tiro del final pareció que quedaba para el costado albiceleste, pero no hubo puntería y Newell’s respiró.

En el primer acto, Racing sacudió la modorra apenas en el primer minuto, cuando Cámpora reventó el travesaño con un cabezazo a la salida de un córner. Aunque poco a poco, Newell`s empezó a manejar el balón y a aparecer cada vez más peligrosamente cerca de Saja. Que transpiró bastante, sobre todo en una estupenda atajada a Scocco a los 31’ y un tiro libre del propio Nacho, diez minutos después, que pasó cerca. Se fueron al descanso con la impresión de que los rosarinos habían sido más.

En el complemento, los del Tata se apagaron. Ya no hubo conexiones saliendo de la mitad de la cancha, Bernardi se quedó sin socios y Scocco debió arreglárselas solo arriba. Y Racing tomó impulso, ganó todas las divididas y se plantó cerca de Guzmán. Al que sobresaltó con centros peligrosos, como el que a los 17’ lo encontró solo a Cámpora, quien increíblemente la tiró afuera de cabeza. También de arriba, a los 34’, lo tuvo Pelletieri, pero se lo negó Guzmán.

Y a Newell’s le cayó bárbaro el final. Sobre todo por esa ocasión ya descripta, en el último segundo, cuando un centro a la olla casi acaba tres veces dentro del arco del Patón. Pero también porque todo sigue como hasta antes del pleito: con el invicto y la punta. Dos atributos que valen oro a esta altura del campeonato, cuando ya todos han entendido el mensaje de que, aunque esta noche no se lo vio tan lúcido y contundente, es el conjunto leproso el máximo aspirante al título.