El Concejo Municipal aprobó este jueves una ordenanza que prohibe que el ofrecimiento de saleros en los comercios gastronómicos. La iniciativa tiene como objetivo "la concientización a la población sobre la necesidad de disminuir la incorporación de sal en las comidas para reducir el consumo de sodio".

El proyecto presentado por los concejales Miguel Cappiello, Manuel Sciuto y Viviana Foresi generará un cambio de hábito a la hora de comer afuera.

De esta manera, los comercios gastronómicos deberán incorporar en las cartas una leyenda que indique que "el consumo excesivo de sal es perjudicial para la salud". Y que se le brinde al usuario la posibilidad de pedir su plato sin el agregado de sal. 

Según la iniciativa, dichos negocios deberán poner a disposición de los comensales la sal dietética con bajo contenido en sodio. A su vez, el chef será la única persona que tendrá el uso exclusivo de la sal.

En caso de registrarse incumplimientos a la ordenanza aprobada, se podrán aplicar multas por parte del Ejecutivo. En tanto, los locales tendrán un período de 15 días para solucionar el inconveniente.