Comenzaron las elecciones presidenciales y legislativas en Nicaragua con la apertura de los centros de votación a las 7.00 (las 10 en Argentina).

Durante esta jornada, un total de 3.665.141 nicaraguenses están convocados a las urnas para elegir al presidente y al vicepresidente de la república, además de 90 diputados del parlamento nacional y 20 para el parlamento centroamericano (Parlacen).

Son cinco los candidatos que buscarán la jefatura del Estado: el sandinista Daniel Ortega, los liberales Eduardo Montealegre y José Rizo, el también sandinista pero disidente Edmundo Jarquín y el controvertido Edén Pastora, quien fue dirigente sandinista primero y contrarevolucionario después.

Las elecciones provocaron interés mundial por el posible regreso del líder sandinista Daniel Ortega al poder. El ex mandatario figura como favorito en las encuestas pero deberá batallar frente a dos candidatos liberales y a un sandinista disidente.

Los comicios serán seguidos de cerca en toda la región, ya que una eventual victoria de Ortega podría representar el giro a la izquierda de otro país de América latina.
En tanto, un posible acercamiento del dirigente sandinista al presidente venezolano Hugo Chávez preocupa en Estados Unidos, viejo enemigo del ex líder guerrillero, que advirtió que sus relaciones con Nicaragua podrían verse afectadas si éste último gana hoy.

Ortega asegura haber cambiado y propone una reconciliación, 16 años después del fin de la guerra civil que enfrentó a su gobierno, surgido tras la revolución sandinista de 1979 con los "contras" (financiados por Washington), que dejó unos 30.000 muertos. Además, lejos de su discurso marxista de los 80, promete respetar la economía de mercado.

Desde que dejó el poder en 1990, Ortega nunca acarició tan de cerca la posibilidad de volver a gobernar. Sin embargo, su mayor oportunidad de lograrlo será ganar en primera vuelta, ya que un escenario de ballottage le resultaría adverso ante la derecha