La historia de nunca acabar: definieron una terna de opciones de sistemas de seguridad que serán obligatorios en los taxis; pero los titulares adelantan que no cumplirán la norma y recurrirán a la Justicia. Choferes y dueños de chapas se reunieron este lunes a la mañana con la Comisión de Servicios Públicos del Concejo para definir un sistema de seguridad obligatorio. El acuerdo, según precisó el presidente de esa delegación, el edil Pablo Colono, decidió tres opciones entre las que se deberá elegir: el blíndex, la luz de seguridad o el monitoreo satelital a través de GPS.

Para terminar de definir la situación, los concejales esperarán que llegue antes de este jueves un informe de las áreas de seguridad y transporte de la provincia y del municipio para precisar las características de cada una de las soluciones que serán obligatorias incorporar. Sí esto ocurre a tiempo, sería aprobado por el Cuerpo Legislativo el mismo jueves. 

Sin embargo, el secretario de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti), Mario Cesca, le aseguró a Rosario3.com que la resolución no será acatada por los dueños de las unidades. “La mayoría de los titulares no quiere poner un sistema de seguridad y cree que no pueden obligarlo a hacerlo. Va a ocurrir lo mismo que pasó con la radiollamada: van a llover los pedidos de amparo a la Justicia”, adelantó. En aquel caso, la Cámara de Apelaciones de Rosario suspendió la aplicación de las ordenanzas que obligaban a las unidades tener un servicio de radiotaxi activo y a cubrir una jornada mínima de 16 horas diarias.

En ese sentido, Colono ratificó la intención de hacer la iniciativa con caracter obligatorio y señaló que si bien no hay una sanción pensada para quien incumpla, “los taxis sin sistema de seguridad podrían dejar de funcionar”. “Aunque –aclaró a Rosario3.com-, eso le corresponderá instrumentar al Ejecutivo”.

Raro consenso

Según Colono, en la reunión estuvieron presentes choferes y titulares que manifestaron estar de acuerdo con que al menos un mecanismo de los posibles sea de aplicación obligatoria.

“Yo no fui porque no estoy de acuerdo”, planteó sin embargo Cesca. “No sólo los titulares, la mayoría de los choferes tampoco quiere un sistema porque se van a sentir controlados. Lo que pasa es que desde el sindicato se están cubriendo las espaldas por si hay un nuevo incidente”, precisó.

El concejal socialista sólo destacó como punto conflictivo la lista de opciones. Es que el radical Jorge Boasso planteó que no sean sólo tres los sistemas, sino todos los posibles, como por ejemplo implementar servicios de cobro con tarjetas o poner una caja negra. “Pero quedaron firmes esos tres sistemas, de los cuales uno será obligatorio y se buscará la posibilidad de otorgar créditos desde el Banco Municipal”, reiteró.

“No se podrá aplicar”, retrucó Cesca, para luego relativizar el avance de la Comisión: “Esta discusión recién empieza”.