El consenso casi total que existe en el Concejo para aumentar la tarifa de taxis y a la vez imponer el uso de GPS en todas las unidades, algo que es resistido por los titulares de chapas, no se extendió a la discusión para aplicar todos los días la tarifa nocturna que ahora se cobra sólo los fines de semana.

Este último punto generó la negativa de al menos tres bloques opositores, con seis ediles en total: del Frente para la Victoria (Norma López y Roberto Sukerman), Bloque Encuentro Por Rosario (Osvaldo Miatlleo y Diego Giuliano) y el Partido del Progreso Social (Héctor Cavallero y María Fernanda Gigliani), según adelantó el periodista de Radio 2 en el Concejo Ariel Borderi.

Sin el consenso en el Palacio Vasallo, ese ítem no se tratará el jueves en el recinto y en principio sólo se aprobaría la suba de la tarifa del 47 por ciento en dos etapas (este lunes logró despacho).

Ampliar el cobro de la tarifa nocturna a toda la semana (de lunes a lunes) es un reclamo de los taxistas. Lo defienden como un ingreso extra que, junto con el incremento de la bajada de bandera y ficha, cubriría el reclamo para actualizar el servicio. Es decir, con esa herramienta cerraba la ecuación económico de los vehículos de alquiler.

La falta de acuerdo en ese punto podría agravar el conflicto, que hasta ahora estaba concentrado entre algunos titulares de chapas que se oponen a la imposición de GPS. Con las novedades de este martes, podrían sumarse más taxistas (choferes y dueños) a la protesta lanzada para el jueves.

Un sector, encabezado por Francisco Baéz, convocó a una marcha que partirá este jueves a las 9 desde Oroño y Rivadavia. De allí marcharían al Concejo para repudiar el proyecto, con un paso previo por el municipio.