A fines de mayo, un geriátrico provincial (ubicado en calle Godoy y Provincias Unidas) se hizo famoso cuando destituyeron a su directora tras descubrirse que había festejado su cumpleaños invitando a un stripper a las instalaciones del establecimiento. Ahora, otro geriátrico provincial vuelve a ser noticia. Investigan un presunto caso de abuso deshonesto que habría ocurrido en el interior de la institución para ancianos ubicada en calle Ayolas al 100: un enfermero habría manoseado a una paciente discapacitada.

 

El hecho habría ocurrido aproximadamente quince días atrás, según declaró la paciente, una mujer de unos 60 años que, como consecuencia de haber sufrido un accidente cerebro vascular, se encuentra inválida en una silla de ruedas, pero que está mentalmente lúcida. Según su testimonio, el mismo que repitió ante médicos, psiquiatras y representantes de la Dirección de Asuntos Jurídicos de la provincia, un enfermero de alrededor de 30 años que presta servicios en esa institución habría abusado sexualmente de ella.

 

Ante la impotencia que le provocaba la situación, la mujer decidió contarlo y sus familiares serían quienes luegos efectuaron la denuncia formal ante la Comisaría de la Mujer. En esa dependencia se investiga el caso, según pudo constatar Rosario3.com, y ya han declarado entre martes y miércoles varios profesionales que también trabajan en el geriátrico.

 

Por su parte, el titular del Área 8 de Salud Provincial, Miguel Rabia confirmó al programa de Radio 2 De tarde en tarde que "el Ministerio de Salud ha iniciado un sumario para esclarecer el hecho y que el enfermero ha sido separado del cargo mientras se sustancia la investigación". 

 

Familiares de los pacientes recuerdan otro episodio “irregular” que está siendo investigado por la Justicia y que habría involucrado el director del geriátrico, Walter Hion. El hecho referido por los allegados a los enfermos allí internados da cuenta de una importante donación de alimentos y ropa hecha el año pasado por la agrupación de motoqueros de Rosario, para el día de los abuelos, una donación que jamás llegó completa a manos de sus verdaderos destinatarios, los pacientes del hospital.