Uno es molesto y sobre todo peligroso. El otro es signo de descuido y además alimenta la multiplicación de los mosquitos, esos masivos e indeseables visitantes de estos días. Se trata de la escasez de límites que existe en las obras de construcción, que con arena o escombros invaden veredas, y del pasto del los parques y las plazas, que en las últimas horas se vio muy crecido.

Sobre estos dos problemas hicieron foco la mayoría de las notas que los usuarios de Rosario3.com enviaron al espacio de Periodismo Ciudadano.

Las obras que impiden el paso a los peatones

La falta de mantenimiento en plazas y parques