Ariel Ortega volvió a faltar al entrenamiento de River y alimentó así los rumores sobre su posible retiro del fútbol. El jujeño está realizando un tratamiento por su problema con el alcohol y, según versiones, habría tenido una recaída.

Hasta ayer ningún allegado de River tenía novedades sobre él, que se ausentó sin dar aviso. Ni los dirigentes ni el propio Daniel Passarella pudieron comunicarse con el delantero de 32 años. Por eso, la preocupación era grande.

El martes 3 de octubre también había faltado a la práctica de River, y un día después fue para hablar con el técnico y explicarle su situación. Decidió comenzar un tratamiento y Passarella fue, de a poco, dándole minutos de juego. Hoy, el futuro del jujeño es más incierto que nunca.