No una sino dos denuncias, porque está claro que la ley antitabaco se hizo para cumplirla. Cansada de que le fumen al lado, una empleada del Ansés denunció a sus propios compañeros. La mujer, que es asmática, llevó primero su caso a la Defensoría del Pueblo, después a la Municipalidad y finalmente, ante la falta de respuesta, terminó en Tribunales.

Maria Clara es asmática crónica, además tiene diabetes e hipertensión. "Todo este tipo de complicaciones me afecta enormemente porque se me pude provocar un coma diabético", explicó. "Se me hace imposible respirar en el Ansés. Se fuma en escaleras, en pasillos y baños. En algunos momentos incluso en el lugar de trabajo", explicó.

El derrotero legal de María Clara fue largo. "Presenté dos notas en la Defensoría del Pueblo, las dos sin respuesta. Además otra nota en la Municipalidad y una presentacion judicial a través de un profesional", comentó. "Entiendo la necesidad de fumar porque yo fumaba, pero quiero ir trabajar compartir la jornada con mis compañeros y que todos nos respetemos", reclamó.

El Ansés ya había sido blanco de una denuncia la semana pasada. Un hombre que fue a esa oficina pública ubicada en Rioja y Sarmiento vio a empleados con cigarrillos encendidos a pesar de la ley antitabaco que lo prohíbe expresamente. Tan molesto estaba el hombre que fue a la delegación local del Ministerio de Salud provincial, en Rioja y Buenos Aires, y no tuvo problema –porque así se lo indicaron en el lugar– de ir luego a la seccional 2ª y volver más tarde a la dependencia del gobierno santafesino para llevar la copia de la denuncia.