Sangre en la cabeza presidencial. Como el día que asumió, como varios otros, su torpeza característica le jugó una mala pasada al presidente Néstor Kirchner. Esta vez se golpeó –y se cortó– al ingresar a la camioneta que lo iba a llevar a la reunión de esta mañana con la presidenta chilena Michele Bachelet en Córdoba, antes del inicio de la cumbre de mandatarios del Mercosur.

El jefe del Estado se cortó en la frente y se pudo ver su pañuelo manchado con abundante sangre. Ante el contratiempo, el presidente, que se había mostrado de muy buen humor al salir a la mañana del hotel, cambió la cara y también los planes: finalmente fue en helicóptero al centro de convenciones donde se realiza la cumbre de presidentes.