Desde que se difundió la acción de la agrupación kirchneritsa La Cámpora en escuelas secundarias porteñas, la participación de los estudiantes en política se puso en debate. Consultado al respecto en el programa
A Diario, de Radio 2, el sobreviviente de la denominada Noche de los Lápices, Pablo Díaz, defendió la conformación de centros de estudiantes en donde los más jóvenes canalicen sus necesidades democráticas. Incluso, aseguró que los chicos de hoy tienen mayor participación que los jóvenes de su época y habló de un mayor compromiso político.
Díaz fue uno de los estudiantes secundarios secuestrados en la ciudad de La Plata que sobrevivieron a la noche del 16 de septiembre de 1976. Su testimonio en el Juicio a las Juntas fue clave e incluso. Además, participó del guión de la película que en 1986 llevó al cine esta historia negra.
En diálogo con el periodista Alberto Lotuf, Díaz opinó: “Tomo a los adolescentes como una entidad madura, la necesidad de expresar sus derechos son similares a los demás sectores políticos de la sociedad”, señaló. “No me parece mal que debatan, que expongan sus ideas, no me asusta que exista un nivel político en las escuelas”, subrayó.
En cuanto a las tomas de de los colegios Nacional Buenos Aires y Carlos Pellegrini en Capital Federal, expresó: “Me parece bien socializar las necesidades, si los docentes lo hacen , los estudiantes también. No separo por cuestiones de edad, no creo que esté bien”.
Díaz comparó sus días como miembro activo en la política estudiantil y la actualidad. “Creo que el compromiso es aún mayor al que teníamos nosotros. Hay más participación”, indicó y apuntó que también en el pasado, la acción política entre los jóvenes “fue impulsada por el gobierno de turno”.
Cuando se le preguntó sobre cómo creía que los estudiantes tomaban el mensaje que dejó en la historia esa noche fatal, respondió: “Los estudiantes toman este hecho como una necesidad de participación, lo trasladan a saberse como actores de un proceso democrático”, dijo.
Díaz fue uno de los estudiantes secundarios secuestrados en la ciudad de La Plata que sobrevivieron a la noche del 16 de septiembre de 1976. Su testimonio en el Juicio a las Juntas fue clave e incluso. Además, participó del guión de la película que en 1986 llevó al cine esta historia negra.
En diálogo con el periodista Alberto Lotuf, Díaz opinó: “Tomo a los adolescentes como una entidad madura, la necesidad de expresar sus derechos son similares a los demás sectores políticos de la sociedad”, señaló. “No me parece mal que debatan, que expongan sus ideas, no me asusta que exista un nivel político en las escuelas”, subrayó.
En cuanto a las tomas de de los colegios Nacional Buenos Aires y Carlos Pellegrini en Capital Federal, expresó: “Me parece bien socializar las necesidades, si los docentes lo hacen , los estudiantes también. No separo por cuestiones de edad, no creo que esté bien”.
Díaz comparó sus días como miembro activo en la política estudiantil y la actualidad. “Creo que el compromiso es aún mayor al que teníamos nosotros. Hay más participación”, indicó y apuntó que también en el pasado, la acción política entre los jóvenes “fue impulsada por el gobierno de turno”.
Cuando se le preguntó sobre cómo creía que los estudiantes tomaban el mensaje que dejó en la historia esa noche fatal, respondió: “Los estudiantes toman este hecho como una necesidad de participación, lo trasladan a saberse como actores de un proceso democrático”, dijo.
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Pablo Díaz (Radio 2)
