Tal como se especulaba, Leonardo Carol Madelón se convirtió este lunes en el flamante director técnico de Rosario Central. Así lo confirmaron el propio entrenador y el presidente de la institución Horacio Usandizaga (ver aparte) en rueda de prensa tras salir de la reunión en que se definió el vínculo.
En principio, la idea de la directiva canalla era que Hugo Galloni continuara con su interinato hasta la finalización del torneo, pero la sucesión de malos resultados incidió para que se aceleraran los plazos. Por eso se decidió que el nuevo entrenador se hará cargo ya mismo del plantel auriazul y dirigirá la práctica de este martes en el predio de Palos Verdes.
Sabe Madelón que el pueblo de Central vive momentos de inusitada dureza: castigado en lo institucional por manejos bochornosos, azotado por el látigo del desastroso andar del equipo en el torneo actual, y atemorizado por la amenaza concreta de bajar de categoría si el rumbo no mejora, los canallas vienen de tropezón en tropezón sintiendo que la oscuridad cada vez se hace más densa.
Por lo tanto, se entiende que haya elegido para su primer contacto con la prensa un mensaje cargado esperanzador, cargado de optimismo y promesas de trabajo duro. Al menos, eso es lo que exhibió este lunes por la tarde al enfrentarse a los micrófonos de varios medios de la ciudad en su presentación como técnico del primer equipo auriazul.
"Han lastimado mucho a Central"
“Yo creo que la tarea de un entrenador siempre es difícil”, comenzó. “Si me dicen «agarrá el Manchester», después de la seguidilla de éxitos que tuvo, es difícil; si me dicen «agarrá Lanús después de salir campeón», si es que sale, es difícil; siempre hay que mejorar. Había otros entrenadores capaces para dirigir a Central, pero me tocó a mí. Cuando me junté el viernes con Usandizaga se tomó la decisión; quizás vieron una persona convencida, y por eso me aceptaron”, contó.
En cuanto al pozo en el cual se encuentra estancado el club, y sobre todo el equipo, el ex DT de Olimpo sentenció: “Lo han lastimado mucho a Central. Ojalá que sangre nueva en el banco le venga bien. Hay que refundarlo a Central, y la gente tiene que ser el mejor refuerzo para el semestre que viene, apoyando al equipo. Va a haber turbulencias, pero será importantísimo el apoyo de ellos”.
En principio se suponía que tomaría las riendas del equipo tras el Apertura, pero abruptamente cambiaron de opinión: mañana mismo dirigirá su primera práctica: “Quise agarrar el viernes, porque van pasando los partidos y seguís perdiendo, y todo puede ser peor. Si está el okey, ¿por qué tengo que esperar15 días en mi casa si puedo ser útil? Díganme ustedes: San Lorenzo, cuando se fue Ruggeri, ¿alguien pensó que podía ser campeón?”, comentó.
A la hora de analizar al plantel con el que se encontrará, Madelón dijo que “desde lo deportivo, es un equipo que juega muy bien. Pero cuando no ganás, perdés la razón. Yo no soy mago, pero sé que esa suerte que no tuvo va a venir. Todo vuelve. Va a haber que trabajar; somos un cuerpo técnico que trabaja mucho. Hemos armado equipos duros, contundentes, prácticos, y Central tiene todo. No hay que desesperarse: cuando estás último todo es difícil”.
Sobre los posibles refuerzos que maneja para mejorar el potencial del grupo, el oriundo de Cafferatta afirmó: “Se dicen muchas cosas, hay intereses de todo el mundo porque Central es grande. No me voy a apurar, la emergencia es sacar al equipo de esta situación. Faltan 21 fechas, dos de este torneo y 19 del que viene. Este conjunto de fechas nos va a llevar hasta el final, y no tengo dudas de que será un éxito. Tendremos un semestre de presión, pero tenemos que estar tranquilos porque la impaciencia va a ser mala consejera. Hay mucha capacidad, por eso me gustó agarrar ahora: a este equipo le entra toda carga física, anímica, y me gustaba agarrar hoy porque la llegada de un nuevo entrenador los podía motivar. Pero en cuanto a los refuerzos no hay nada; trascienden muchas cosas, vamos a usar el cien por cien de la capacidad nuestra, y ojalá alcance y sobre”.
Ya entrando en detalles acerca del método de trabajo que empleará para sacar adelante al equipo, el DT confió: “Los mensajes llegan para motivar: yo confío en mis capacidades, y convencido de eso, aquí estoy. La motivación es una parte importante, sobre todo en este período difícil que nos toca. Hay capacidad en mi equipo; no es marketing. Central necesita gente que trabaje mucho, y con perfil bajo. Pero la gente me conoce bien, gracias a Dios preguntaron en el ambiente del fútbol, en gremios, en AFA, en los árbitros, y todos les dieron el mejor de los conceptos: eso me halaga mucho”.
Por último, desestimó las críticas que le endilgan falta de experiencia en Primera diciendo “hay que informarse, vine como técnico de Unión y Nueva Chicago a jugar acá”, y finalizó con esta frase cargada de optimismo: “No le tengo miedo al fracaso; si no, no estaría acá”.