Frasco en mano. Así se movilizarán los trabajadores municipales el martes 28, cuando inicien un nuevo paro de 48 horas en reclamo de un aumento salarial, fracasada ayer la reunión con los intendentes en el marco de la conciliación obligatoria.

La idea es dejar el frasco en la puerta de los Palacios de los Leones y dar así una respuesta simbólica a la crítica que el intendente Miguel Lifschitz formuló a los empleados municipales por lo que considera un desmedido reclamo salarial: “Viven en un frasco”.

Los delegados del Sindicato de Trabajadores Municipales analizaban este martes cómo implementarán la medida de fuerza de 48 horas de la semana que viene. Allí, en diàlogo con el periodista Ariel Borderi, de Radio 2, el secretario adjunto del gremio, Antonio Ratner, insistió en que era inaceptable la propuesta del 7 por ciento de aumento que hicieron los intendentes y que hay que buscar “una solución equidistante” entre el 7 y el 10, es decir que el conflicto se solucionaría con el 8,5 por ciento.

Ratner consideró que los municipios y comunas tienen recursos para hacer frente a ese monto. “No es que estén en la abudnancia, pero han ajustado tasas, incrementaron las retribuciones por la prestación de servicios, aumentó la coparticipación. Mejor administrados los municipios tendrían para el aumento y para prestar los servicios que les corresponden”, afirmó.

Ayer, el secretario de Gobierno local, Horacio Ghirardi, planteó un escenario distinto. Aseguró que se mejoró la oferta salarial por cuarta vez y se llevó del 5 por ciento de suba inicial a un 7. Además, recordó que en lo que va del año se aumento un 30,4 el salario de los trabajadores, mientras que la inflación está cerca del 20 por ciento.

“Hicimos una muy buena propuesta de acuerdo a la crisis que atravesamos y nuevamente la han rechazado. Lo cual habla de alguna manera de una mala predisposición”, señaló Ghirardi al programa De tarde en tarde.