La Selección argentina volvió a los entrenamientos después de la tarde de descanso de ayer otorgada por el director técnico José Néstor Pekerman. La jornada fue tranquila y se privilegio el trabajo físico, de cara al debut mundialista del próximo sábado ante Costa de Marfil, que según el volante Juan Román Riquelme será “partido más importante”. “Si ganamos, tenemos bastante avanzada nuestra meta. Y queremos ganar como sea porque de triunfar en el primer partido eso no dará bastante tranquilidad”, aseguró. Por su parto Carlos Tevez, reconoció: “No sé si tendré la chance de ser titular, pero el que entre va a dar todo porque lo más importante es el seleccionado”. “Si no me toca jugar, igual voy a alentar desde afuera; acá somos 23 jugadores con lindos pies”, agregó el ex Boca. Los últimos ensayos tácticos para ese choque en Hamburgo dejaron traslucir diez nombres virtualmente seguros, con Javier Saviola ganándole el lugar a Carlos Tevez en la delantera junto a Hernán Crespo, y con Juan Pablo Sorín y Gabriel Heinze recuperados. Entonces, Argentina formaría con Roberto Abbondanzieri, Nicolás Burdisso, Roberto Ayala, Heinze, Sorín, Javier Mascherano, Esteban Cambiasso, Maxi Rodríguez, Juan Román Riquelme, Javier Saviola (o Tévez) y Hernán Crespo. De todos modos, sería una formación con un típico 4-4-2, que según el desarrollo del juego se haría más agresiva por la tendencia de Sorín de irse arriba. Cuando ello ocurra, la defensa desplegaría una línea de tres y el ataque se vería reforzado por el propio “Juanpi” y por el adelantamiento de otros mediocampistas, como Rodríguez y Riquelme.