Desazón y bronca. Esas dos palabras resumen lo que sienten los trabajadores de la cerrada fábrica de aros de pistón que cerró la empresa alemana alemana Mahle, que desde abril esperan una reapertura de la planta que se prometió muchas veces y jamás se concretó.

Claudio Maldonado, delegado de los trabajadores, explicó que hace rato “no hay comunicación” con Aros Kim, la empresa que aparecía como candidata a quedarse con la planta de avenida Perón al 5600 para recativarla.

La falta de noticias desespera a los trabajadores. Maldonado dijo que el Ministerio de Trabajo de la Nación “se borra de a poco” y dijo que hay un “manoseo increíble” en torno al tema, algo que, sostuvo, es una “vergüenza total”.

El delegado dijo que los trabajadores –en realidad una parte de ellos, ya que muchos aceptaron las indemnizaciones y ya no apuestan a volver a la fábrica– van a seguir luchando y que ahora le pedirán una audiencia al gobernador Hermes Binner para que “se haga cargo de lo que todos prometieron”.

Maldonado advirtió: “Si tenemos que plantar una carpa frente a la Gobernación lo vamos a hacer”.