Con movilizaciones en las rutas y declaraciones de dirigentes rurales que manifestaron el malestar, transcurrió este viernes el primer día del paro del campo. La medida se extenderá hasta el próximo 4 de septiembre y consistirá en la no comercialización de granos y ganado.

Los integrantes de la mesa de enlace instaron a movilizarse en los caminos y no cortar el tránsito. Sin embargo, el entrerriano Alfredo De Ángeli amenazó con piquetes “si el gobierno provoca a los productores”.

Durante la primera jornada, el impacto más fuerte lo recibieron las plazas granarias, donde la inactividad fue total y sólo operaron los mercados electrónicos, sin referentes en los recintos de ninguna de las Bolsas de Cereales ni Mercados a Término del país.

En Liniers, en tanto, el impacto del paro comenzará a sentirse desde el lunes, ya que se esperan ingresos magros de vacunos.

Además, se realizaron asambleas en Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Entre Ríos y La Pampa. En algunas deliberaciones, los productores con bronca no descartaban una extensión de la protesta rural.