"No termino con el deber cumplido. Para mí, deber cumplido es llegar a la final. Nunca me preparé para esto, nadie se preparó para esto, por eso es un momento muy difícil para nosotros". Las frases pertenecen al entrenador brasileño Carlos Alberto Parreira, durante la conferencia de prensa que brindó tras el partido que Francia le ganó a Brasil por 1-0. "Lamentablemente, hoy nos encontramos con un equipo muy organizado, muy experimentado. No tengo arrepentimiento de lo que hice. Confirmamos la aplicación táctica del equipo que enfrentamos. Merecieron el resultado", dijo el técnico con la voz entrecortada. Parreira hizo un balance crítico y nada satisfactorio con su gestión de casi cuatro años. "Cuando no ganamos el título dejamos mucho que desear. Nos faltó un poco de preparación. Este equipo jugó muy poco antes de comenzar el Mundial", destacó. Como si estuviera dirigiéndose a los 180 millones de brasileños, Parreira afirmó: "lamentamos todo lo que ocurrió. Agradezco a los jugadores por el empeño, por el trabajo que hicieron". El estratega, de 63 años, afirmó que Brasil debe mirar ahora al futuro, aunque nada dijo sobre su continuidad. "No tengo la preocupación si voy a continuar. Lo hablaré después de la copa", expresó. Parreira admitió que Brasil perdió un partido con las armas que ya conocían del adversario y a pesar de haber discutido estos fundamentos durante los entrenamientos previos al partido en Fráncfort. "Un jugada de balón detenido lanzado por Zidane al costado opuesto decidió, como en el Mundial la misma jugada ha decidido varios partidos. Además, las estremecidas de Zidane y Henry nos hicieron daño", añadió. Pese a ello, Parreira defendió el comportamiento de sus defensas, que en cinco partidos apenas encajaron dos goles. Y disculpó a sus atacantes, que terminaron jugando casi todos frente a la puerta de Barthez, salvo Fred que permaneció en el banco. De Zidane, la figura del partido, el seleccionador brasileño expresó elogios, aunque sin ninguna sorpresa por su desempeño. "Es un jugador que conocemos hace muchos años. Hoy jugó muy bien. Tuvo el balón y acabó decidiendo en una jugada a balón parado. Había preocupación con él, sabíamos de la jugada, nos creó muchos problemas", apostilló. De Francia, una vez más el verdugo de Brasil desde que se encuentran en mundiales, hace veinte años, afirmó que es un equipo "muy experimentado y técnico que creció en el momento preciso", ante España en los octavos de final. "Francia tuvo más paciencia que nosotros", puntualizó. Fuente: EFE