Paula tenía previsto ir a Buenos Aires en un micro que salía a las nueve de la mañana de un domingo. Pero el viaje empezó media hora más tarde de lo planeado y llegó a destino incluso más tarde. Cristina y Alberto debían llegar desde Buenos Aires a la Terminal de Rosario a las nueve de la noche, pero lo hicieron –muy enojados– media hora después. Una semana después, Virginia tuvo demoras en el mismo trayecto, tanto de ida como de vuelta. Notó además que el "directo" que había tomado hacía muchas paradas no anticipadas.

Las empresas eran diferentes, los días y los horarios en que viajaron también. En ninguno de los casos hubo denuncias formales, pero sí muchas quejas que llegaron a los oídos de Rosario3.com. 

Con las empresas de transporte de larga distancia se sabe el horario de partida, pero no hay demasiadas precisiones con el de llegada: esa es la respuesta que brinda la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT).

"El horario de llegada a destino no está reglamentado”, dijo como primera respuesta Valeria Rivero, operaria telefónica de la Comisión encargada de recibir las denuncias, a través del 0800 333 0300, de los usuarios del transporte. Agregó que “de acuerdo a las condiciones de las rutas, la marcha puede ser más lenta en determinados días y horas". También señaló los congestionamientos de tránsito en algunos trayectos (en especial en Capital Federal), y la llegada de la temporada alta en la que una cantidad mayor de vehículos salen a las rutas.

“Por esa razón –dijo la operaria– el horario de arribo que se informa a los pasajeros en las boleterías, cuando compran su pasajes, es aproximado, pero no exacto”, y remarcó que los únicos casos de impuntualidad en la llegada en los que la CNRT interviene, son aquellos en los que por rotura del coche, el servicio termina siendo suspendido. "En esas situaciones, las empresas deben devolver el importe del boleto a los pasajeros y resultan multadas si no solucionan el desperfecto o dejan a los pasajeros varados sin posibilidad de completar el viaje por el cual pagaron", aclaró la empleada.

Otro secreto a voces es que muchas empresas, debido a la crisis y el aumento de los costos, recortaron algunos servicios por lo que más gente se acumula en cada viaje y esto obliga a realizar más paradas, por lo que ya casi no existen los viajes "directos" a Retiro.

El problema es que en la gran mayoría de los casos, tal como los mencionados al principio, no se realizan quejas formales sobre las demoras. “No tenemos constancia de reclamos en ese sentido que se hayan efectuado en nuestras oficinas”, afirmó en diálogo como Rosario3.com, el presidente del Consejo de administración de la Empresa del Estado Municipal Terminal de Ómnibus Rosario, Oscar Borra.

“Tampoco tenemos reportes de esas empresas en relación con problemas puntuales que hayan provocado la demorada referida por esos pasajeros”, informó el funcionario, quien sin embargo deslizó que en ocasiones el ingreso a Capital Federal suele ser bastante complicado por el volumen de tránsito y quizás eso influya en el cronograma de tiempos estimados.