Con quema de cubiertas y carros cruzados sobre Sorrento y Travesía, en la zona norte de la ciudad, vecinos y familiares de los dos chicos de 3 y 6 años que fueron separados de su entorno por la provincia denunciaron el violento procedimiento realizado y reclamaron que se revea la medida para poder ver a los niños. Mientras tanto, se preparaban para montar un acampe y pasar la noche en el lugar. El accionar fue defendido por la Dirección de la Niñez.
El operativo fue realizado por las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) en coordinación con la Justicia. Los padres de los chicos tienen un problema de adicción y el entorno era violento, argumentaron los responsables de tomar la decisión.
Sin embargo, la abuela de los nenes en cuestión afirmó este martes a la tarde al periodista de Radio 2 Gustavo Poles que ella estaba a cargo por el problema de los padres.
“Se llevaron a mis nietos sin ningún motivo. Estaban a mi cuidado desde que nacieron”, relató la mujer y comentó que hace un mes -cuando se produjo el prodecimiento- ella se encontraba con dolores de cintura y “como no podía llevarlos a la escuela, le pedí a los padres que los llevaran”.
“Me sacaron a los chicos como un perro. Fuimos a desarrollo social y dijeron que no los encontraban. Los pude ver recién después de un mes”, agregó. Tampoco los padres puede tener contacto libre con los chicos.
Además, un cartel que pegaron sobre un contenedor, exige: "La dictadura dejó de existir hace años para que vuelvan a secuestrar a nuestros hijos. Basta de sacarle a los niños el derecho de estar con sus padres" (ver imágenes).
Por otro lado, un vecino que fue testigo del accionar policial contó que las TOE entraron al domicilio en la zona de Travesía “tirando balazos al aire y rompieron la puerta”, además de pegarle al padre de los chicos.
Los manifestantes señalaron que mantendrán la protesta hasta que haya una respuesta y un permiso de poder visitar a los niños. Analizaban montar un acampe y permanecer la noche en el lugar.
“Había riesgo de vida”
El subsecretario de Niñez, Adolescencia y Familia, Cristian Allende, respondió al reclamo y afirmó que la medida de protección excepcional en la que intervinieron las TOE está "fundada" por el "riesgo de vida" que corrían los dos niños de 3 y 6 años.
Además, aclaró que la intervención de la fuerza específica fue una circunstancia "muy particular", que se tomó por primera vez y que tiene que ver con una evaluación que hicieron las fuerzas de Seguridad, por el contexto familiar. Según detalló en una nota que publicó Rosario12, la denuncia sobre la situación de los niños, donde se mezclan cuestiones de consumo de sustancias y violencia familiar (consta en los fundamentos), fue realizada por un abuelo de los pequeños.
“Hay dos circunstancias a tener en cuenta y la medida está fundada en un pedido conjunto de varios actores", dijo Allende, y mencionó a un Centro de Acción Familiar, el Centro de Salud de la zona, a la Defensoría de Niñez (que tenía conocimiento de la situación) y al Hospital Zona Norte, como los dispositivos que hicieron el seguimiento.
El funcionario detalló que "había una situación muy grave de riesgo de vida para los niños, y eso está fundamentado. Se tomó la medida y los chicos fueron inmediatamente hospitalizados en el Zona Norte por 48 horas. Fue totalmente necesario, y es parte de lo que fundamentó la medida", dijo sobre los resultados positivos que arrojó un estudio toxicológico.