Mujeres en Lucha, un grupo que resistió remates de campos de chacareros endeudados durante la década del 90, empezarán a ser juzgadas este viernes, un día antes del aniversario del golpe militar del 24 de marzo de 1976 en Mercedes, la ciudad donde nació Jorge Rafael Videla. ¿Por qué? Por haber cantado el Himno nacional, como lo hacían en cada remate al que iban, durante un intento por frenar la subasta de un campo en Chivilcoy. La imputación es por resistencia y lesiones leves a la autoridad.

Ana Galmarini, líder del grupo, habló con el programa Diez puntos, de Radio 2, minutos antes de ingresar a la sala. “Tenemos una especie de alegría con bronca”, describió. Bronca por tener que enfrentar esta acusación absurda. Alegría, porque fueron a acompañarlas “mujeres de Nequén, Villa Ocampo, tanta gente que estamos en un reencuentro”.

En el juicio, declararán como testigos, entre otros, el presidente de Federación Agraria, Eduardo Bussi, la diputada nacional Susana García y otros dirigentes.

El episodio que motivó el juicio fue el 12 de setiembre de 2003. “Oíd mortales, el grito sagrado, libertad, libertad, libertad”, intentaron entonar Ana Galmarini, Ana María Ribeiro, Sara Coll y Emma Martín en Chivilcoy. Por ese acto el juez Rogelio Massón ordenó que las expulsara la policía. Las llevaron con violencia, estuvieron detenidas varias horas, y fueron denunciadas por resistencia a la autoridad y lesiones leves. Desde entonces, rechazaron la alternativa de cumplir con una probation porque implicaba reconocer que habían cometido un delito.A

Ana Galmarini contó que “los abogados no se explican por qué el fiscal está tan firme en mantener la causa. Mecerdes es un lugar muy conservador, acá nació Videla”, buscó una razón.

Por su parte, el abogado de las imputadas, Fernando Molina, dijo que espera que el juicio no prospere. Aunque desconfió: “No tendría que haber llegado hasta acá y llegó”.