Muchas infecciones pueden complicar la salud de la mujer embarazada o la del bebé durante el período intrauterino. Las infecciones más frecuentemente asociadas con problemas en el recién nacido son la toxoplasmosis, listeriois, salmonelosis, rubéola, citomegalovirus y herpes genital.



Para evitar los posibles contagios existen algunas medidas de prevención simples, al alcance de todos:



- Es aconsejable tener precaución con el contacto con gatos, y otros animales domésticos. No manipular excrementos de animales sin la protección adecuada de guantes de plástico o látex.



- No comer carnes ni huevos que no estén suficientemente cocidos. Evitar embutidos que no estén lo suficientemente curados. Evitar productos lácteos o sus derivados que no sean preparados con leche pasteurizada.



- Siempre lavarse las manos después de tocar carne cruda.



- Evitar comer verduras y frutas que no estén adecuadamente lavadas. Ante la menor duda evitar su consumo. En los casos de frutas, es preferible que estén peladas.



- Evitar el contacto con personas que padezcan enfermedades infecciosas. Recordar que todo niño con fiebre puede ser portador de una enfermedad infecto-contagiosa que puede afectar a la mujer embarazada.



- En las relaciones sexuales utilizar protección con condón en los casos que el compañero presente síntomas de irritación o lesiones sospechosas.

Fuente: Babysitio