Luego de que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, acusara al sector cárnico de haber aumentado el precio de los cortes “artificialmente”, desde la Asociación de Productores de Carne Bovina (Aprocaboa) salieron a contestarle. Culparon al gobierno de ser el único que atenta contra la mesa de los argentinos.

En su habitual rueda de prensa, el jefe de ministros tildó de “especuladores y acaparadores” a los productores ganaderos que hicieron disparar el precio de la carne para ejercer presión y obtener mayores dividendos. La semana pasada, el titular de la Sociedad de Carniceros, Jorge García, había anticipado una suba del 20 por ciento.

“Sabemos muy bien cómo se articulan las estrategias de estos grupos que pretenden especular con la mesa de los argentinos –disparó Capitanich–; no voy a decir cómo se alimenta una vaca, pero es un insumo no dolarizado”.

Sin embargo, para Ángel Girardi, titular de Aprocaboa, el único responsable de que en la mesa de los argentinos falte la carne es la propia administración de Cristina Kirchner y sus, según él, malas políticas agropecuarias.

Para demostrar que los ganaderos no son especuladores, invitó a los funcionarios a recorrer el campo.

“Hay menos alambrados, casas abandonadas”, describió Girardi y explicó que tal paisaje es el resultado de los productores que ya no se dedican a la ganadería, “cansados de ser felpudos de los funcionarios de turno”.

“Hemos perdido 12 millones de cabezas”, precisó y lamentó que el país ya no oestente el lugar de privilegio que supo tener en el mercado internacional por la calidad y cantidad de su materia prima.