No hay duda de que 2007 es uno de los años más cargados. Es que hoy es el segundo martes 13 del actual calendario, el anterior fue el mes pasado y habrá un tercero que ocurrirá en noviembre. Un refrán popular, originado en Italia y adaptado a la Argentina, previene que "en martes, no te cases ni te embarques, ni de tu casa te apartes".

La mala suerte que se le asocia deriva del nombre con que los romanos rebautizaron a Ares, el dios griego de la guerra: lo llamaron Marte y le adjudicaron un día de la semana, justamente, el destinado a las riñas en el circo. 

Al martes los relatos bíblicos le sumaron el 13, que sin embargo para los romanos no era un mal número, ya que amaban las cifras impares y tildaban de maléficas a las pares. El caso es que el capítulo 13 del Apocalipsis habla de la venida del Anticristo y la Bestia; que en la famosa confusión de lenguas en la Torre de Babel habría ocurrido un martes 13; y que en la Ultima Cena, tras comer junto a sus 12 discípulos, Jesús, el comensal número 13, terminó crucificado.

Pero no hay que acusar de esto a la Biblia: desde mucho antes la mitología nórdica (celtas, normandos, vikingos) tenía al 13 como número fatídico. La leyenda cuenta que Balder, la máxima deidad celta, había invitado a 11 dioses a un banquete en su residencia del Valhalla, pero Loki, el espíritu del mal, se coló y totalizaron 13
comensales. El resultado fue luctuoso: en la lucha que se produjo para expulsar a Loki, Balder encontró la muerte. 

La superstición se difundió en toda Europa y al comenzar la era cristiana ya estaba establecida en los países mediterráneos, por lo que se supone que quienes reescribieron en el siglo IV el Nuevo Testamento, tomaron nota de aquella antigua leyenda celta para describir la Ultima Cena. 

También se dice que las experiencias vitales del ser humano son 12, por lo que agregarle otra significaría una anormalidad. Las 12 experiencias vitales son: el ego, la posesión, la comunicación, la familia, la creación, el servicio, la asociación, la sexualidad, la trascendencia, el poder, la proyección y el aislamiento. Tales experiencias están descriptas por las 12 casas del universo astrológico que se relacionan con los 12 signos zodiacales.

También a cada año, los chinos le adjudican la regencia de uno de los 12 animales que estuvieron con Buda cuando alcanzó la iluminación. Y como no podía ser de otra manera, 12 fueron los apóstoles. Al refrán "el martes, ni te cases ni te embarques" se agregan otros no tan conocidos pero quizás igualmente válidos: "El martes
ni gallina eches, ni hija cases"; "El martes ni hijo cases, ni cochino mates"; y "El martes ni tu casa mudes, ni tu hija cases, ni tu ropa tejas". 

Otras cábalas a tener en cuenta en martes 13 son: no invitar a trece personas a la casa; no cortarse las uñas ni el pelo; no subirse al auto, al tren, al avión, ni al barco; no firmar contratos de ninguna especie; no ingresar a ningún sitio con el pie izquierdo; y no olvidar ponerse una cinta roja en la muñeca.