En “Ave María Town”, todos podrán dormir con las puertas de sus hogares sin llaves, nadie romperá las plantas del vecino, ni utilizará su espacio de estacionamiento. Nadie hablará mal del otro, al menos que rompa con las reglas del lugar, una ciudad exclusivamente para católicos, también conocida como la Ciudad sin pecados.
En internet puede ya reservarse un lugarcito y según el el empresario Tom Monaghan, quien lidera el emprendimiento, "3500 personas han pedido información a través de la web, para comprar casa aquí". Cada inmueble tendrá capilla privada y la iglesia, en el centro del pueblo, abrirá a las seis de la mañana los siete días de la semana.
"Vamos a controlar el negocio inmobiliario, no se venderá pornografía en la ciudad. Nosotros controlaremos la televisión por cable. Las farmacias no van a vender condones, ni anticonceptivos. Será una ciudad única", aseguró Monaghan, dueño además del equipo de beisbol ´Los Tigres de Detroit´, al que en 1989 un libro le cambió la vida y lo convirtió en este enfebrecido católico.
El empresario converso planea construir 11.000 casas en esta su visión del Paraíso en la tierra y de hacerse realidad, la ciudad Ave María se convertirá en la primera comunidad católica estadounidense enclaustrada. ¿No suena un poco aburrida la vida en la Ciudad sin pecados?.