La derrota en Copa Santa Fe a manos de Unión volvió a encender las alarmas en Newell's. Y no tanto por lo que significa la caída en lo deportivo, sino porque el entrenador del equipo principal, Omar De Felippe, volvió a exponer su preocupación por la falta de refuerzos.

"Faltan tres semanas para empezar el torneo, y esto es lo que tenemos. Si no vienen lo refuerzos, tendremos que competir con estos chicos", dijo con gesto duro, dejando en claro que la situación es la misma que a fines de la pasada Superliga.

De Felippe no se cansa de decir que pretende contar con un plantel con mayores recursos, sin tanta juventud y con incorporaciones que le den el salto de calidad. Pero hasta acá, sólo llegaron Leandro Grimi y Zé Turbo, más el regreso de Joel Amoroso desde Belgrano. 

"La situación es complicada porque los equipo no se arman en una semana. Yo vivo la realidad que nos toca vivir. Nos hacemos cargo. Quiero empezar el torneo y lo voy a empezar. Pero también quiero tener herramientas para poder construir", señaló.

El ex DT de Independiente insistió: "Armar un equipo que funcione nos va a llevar un tiempo. Si no, el futuro ya lo conocemos". La realidad económica del club no permite ser demasiado optimista sobre el accionar rojinegro en el mercado de pases. Y esto, De Felippe también lo sabe.