La historia del pollito detenido tras ser denunciado por una mujer de Formosa a la que le rompió una máscara indígena sigue generando polémicas. Ahora, la denunciante dice que el tema continuará "en la Justicia". Liliana Ríos, una vecina del barrio 7 de Mayo que llevó el ave hasta la seccional luego de denunciar que el pollo le había roto la máscara, señaló ayer que esta semana llevará el caso a la justicia ordinaria. "Quiero que me devuelvan la máscara de barro cocido que traje de Bolivia y está realizada artesanalmente por aborígenes aymará" dijo la mujer.

Fuentes del Poder Judicial formoseño indicaron que "nunca tuvimos un caso de disputa por destrozos producidos por un pollo. Pero no podemos adelantar si aceptaremos la causa hasta que no se concrete" enfatizaron. La mujer mantiene una vieja rencilla con su vecino Ramón Garicoche, un voluntario de la Fundación Garraham, por cuestiones de convivencia que casi siempre termina en denuncias policiales.

El comisario Cirilo Bobadilla, vocero policial, confirmó la insólita información y señaló que "el personal de la seccional séptima se vio sorprendido por la presencia de la mujer con un pequeño pollito en una bolsa, tras lo cual, ante la insistencia de la denunciante, lo retuvieron hasta que el propietario pasó a retirarlo". El plumífero fue alojado "en el patio de la sede policial y había ingresado en una celda.

"No lo podía creer. Tanto escándalo porque un pollo se escapó de mi patio y se metió en el de la vecina", dijo Garicoche en declaraciones a la prensa. "Los detenidos que compartían la celda con el pollito de mi hija me dijeron que nunca vieron algo así", señaló el dueño del pollo.

El hecho ocurrió en las últimas horas de ayer en el barrio 7 de Mayo de Formosa Capital, cuando una mujer se dirigió a la comisaría séptima con un pollo en una bolsa y lo entregó a la policía. Según las fuentes, la mujer denunció que el animal le había comido "una mascarrilla facial de belleza" por lo que el ave quedó retenida en la seccional por unas horas.

Luego, los efectivos policiales avisaron al dueño del pollo, identificado como Ramón Garicoche, vecino de la denunciante, quien se trasladó hasta la comisaría para retirar el animal. "No lo podía creer. Tanto escándalo porque un pollo se escapó de mi patio y se metió en el de la vecina", dijo el hombre.