Una adolescente de 15 años de la ciudad de Santa Fe fue rescatada de una situación de explotación sexual infantil. La madre de la joven había hecho una denuncia policial a principios de julio y manifestó que la chica era explotada sexualmente por su ex pareja, un hombre mayor de edad, en una vivienda de la ciudad de Rafaela.

La mamá también contó a las autoridades que ante la negativa de continuar con el sometimiento, su hija era reiteradamente amenazada por esta persona. Por este motivo la dirección de Trata de la provincia intervino asistiendo psicológicamente a la adolescente y luego de rescatarla dispuso una custodia en el domicilio.

A partir de las tareas investigativas realizadas para detectar el lugar de explotación, los agentes policiales que dependen de la dirección de la dirección de Trata dieron con un dato y el 12 de septiembre allanaron la vivienda ubicada en la calle Jaime Ferré y Boulevard Lehman de la ciudad de Rafaela.

Los efectivos policiales constataron que en ese lugar funcionaba un prostíbulo encubierto en cuyo interior se encontraban tres mujeres; dos de ellas dedicadas a la actividad sexual y la restante al regenteo y administración del sitio, cuya función era la de recibir a los clientes y acordar el pago conforme a las tarifas estipuladas por las prestaciones que ofrecían. También se hallaba un hombre, considerado como "cliente prostituyente", que se encontraba consumiendo los servicios de las mismas, siendo todas personas mayores de edad.

La encargada del lugar fue detenida y puesta a disposición del magistrado en la causa, identificada por el delito de "facilitamiento de la prostitución de menores”, una figura penal conexa al delito de trata de personas.

Las dos mujeres restantes fueron asistidas en forma inmediata por una psicóloga y trasladadas al Centro de Atención a la Víctima de Rafaela para continuar con la asistencia; y posteriormente, trasladadas a la ciudad de Santa Fe de donde eran oriundas.

El cliente, por su parte, aportó información de interés para el hecho que se está investigando. En el lugar, el personal de la dirección de Trata secuestró libros de pases profilácticos, dos cargadores de pistolas 9 mm con veinticinco cartuchos intactos, dinero en efectivo y otros elementos.