La ministra de Defensa, Nilda Garré, sostuvo que la voladura de la fábrica militar de Río Tercero fue "una explosión intencional" y anticipó que su cartera analiza la posibilidad de presentarse como querellante en la causa judicial.

"Se trató de una explosión intencional. Para que la onda expansiva no fuera hacia una fábrica de productos químicos cercana, se direccionó hacia la ciudad", señaló la ministra, y definió ese hecho ocurrido en noviembre de 1995 como "el más monstruoso de toda la década del ´90".

En una entrevista publicada hoy por el matutino cordobés La Voz del Interior, la funcionaria consideró que la explosión de la fábrica militar "supera el caso Amia, no en cantidad de muertos, pero sí en cuanto a lo inconcebible de que funcionarios del Estado nacional, para tapar un delito, hicieran una voladura intencional de un polvorín".

Garré, en tanto, admitió la posibilidad de que su Ministerio se presente como querellante en la causa que se sustancia en la Justicia Federal de la ciudad de Río Cuarto, luego de que el conjuez de esa ciudad Diego Estévez dictaminara que no había pruebas sobre la intencionalidad de la explosión.

"A raíz de esta resolución inconcebible del juez estamos analizando presentarnos como querellantes, ya que Fabricaciones Militares estaba entonces en la órbita de Defensa", dijo Garré, y remarcó la "vinculación" entre esa explosión y "la causa por el contrabando de armas" a Ecuador y Croacia.