En el único partido del día en el Mundial de Rugby de Francia, Escocia humilló este martes a Rumania con un contundente 42-0, por lo que sigue a tiro de los All Blacks de Nueva Zelanda en el grupo C.

Al igual que contra Portugal, el marcador reflejó una superioridad que los escoceses no mostraron en Murrayfield, donde volvieron a poner de manifiesto que atraviesan un buen momento.

Pero frente a los rumanos se encontraron con un partido cómodo que dominaron desde el segundo minuto cuando Paterson transformó un try por la vía rápida que puso cuesta abajo el encuentro para los británicos.

Hogg logró el segundo try a los 17 minutos tras una buena jugada colectiva que demostró la fuerza de empuje escocesa. Lamont consiguió el tercero al culminar una rápida jugada de Dewey.

A Escocia le faltaba un try para asegurarse el punto bonus y lo logró Hogg en el minuto 46 en otra rápida combinación que agarró desprevenida a la defensa rival.

El jugador tuvo tiempo de lograr otro try más, a los que se sumaron los conseguidos por Parks y Lamont, que cerraron el encuentro.

Escocia empata a 10 puntos con Nueva Zelanda. Ambos equipos se medirán el próximo día 23 en Edimburgo en un encuentro clave para el grupo C.

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