En la primera jornada de paro de los trabajadores autoconvocados de la salud municipal, nuevos ingredientes se suman al conflicto con el gobierno municipal y los aires de resolución dejan de soplar. Es que a los pedidos que los trabajadores de la salud levantan como estandarte en su lucha, los rumores sembrados en torno al posible descuento de los días no trabajados al sueldo de agosto, tiñe aún más de negro el panorama.

Este martes a las diez, los municipales se reunieron en asamblea frente al Cemar. En contacto con Rosario 3.com, Laura Medina, vocera de los llamados autoconvocados, remarcó: “Nos amenazan con especulaciones sin aclararnos si en realidad nos van a descontar los días o no”. El deseo de los trabajadores al respecto, determinó, es “la definición. Que dejen los rumores que sólo amedrentan a los trabajadores”.

Por su parte, Lucía De Vincentis, al frente del grupo habló con Radio 2 y apuntó fuerte contra Miguel Lifschitz: “El Ejecutivo niega la necesidad de recomposición salarial y eso es no entender de qué se trata la carrera sanitaria” y añadió: “Encima el intendente se refiere a nosotros con expresiones poco felices, que diga que sólo nos falta poner una bomba es tratarnos de salvajes”.

Este miércoles, la asamblea se congregará al frente del Palacio Municipal. “Queremos que el intendente nos atienda. No queremos más seguir dialogando con él a través de los medios de comunicación”, exigió Medina, quien repitió el reclamo que los impulsa en esta lucha: “Queremos que los adicionales que los médicos obtuvimos lo tengas los técnicos, los trabajadores sociales y los enfermeros y que se ponga en funcionamiento la carrera sanitaria”.

El conflicto que enfrenta a los trabajadores de la salud tanto de la órbita municipal como provincial con las respectivas autoridades lleva ya dos meses y ningún espacio de diálogo pareciera abrirse. Este martes, por el contrario, nuevas medidas de fuerzas –de 48 horas por parte de los municipales y de 72 de los provinciales –comienzan, en el marco del decreto de un paro por tiempo indeterminado por parte de los trabajadores.

Con el reclamo de la carrera sanitaria y el aumento de salarios para trabajadores sociales, técnicos y enfermeros, los médicos municipales autoconvocados y nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), se reunirán a las diez, frente al Cemar para continuar debatiendo qué hacer de cara al futuro.

En tanto, los profesionales de los hospitales del Ministerio de Salud provincial y también nucleados en ATE volverán a reclamar un salario de 2.500 pesos, además del blanqueo total de las cifras que siguen cobrando en negro y el pase a la planta permanente del ministerio del personal que está como contratado.

En ambos casos, las medidas de fuerza contemplan la atención de las guardias mínimas y de emergencias.

La semana pasada, los trabajadores de la salud protagonizaron medidas de fuerza similares a las que impulsan esta semana. Por parte de los trabajadores nucleados en la órbita municipal, inisisten con ser recibidos por el intendente Miguel Lifschitz, quien ya negó la posibilidad de concretar un aumento en los salarios. En tanto, el secretario de salud Miguel Angel Capiello ofreció retomar la discusión por la carrera sanitaria pero sin mencionar un incremento.

Por su parte, los trabajadores sanitarios provinciales, además de promover una serie de reclamos relacionados con su remuneración, denunciaron falta de insumos, medicamentos, reactivos y camas, a lo que, desde las autoridades del Hospital Provincial se tildó como una actitud “petardista" y se aseguró la prestación del servicio de salud.