El boxeador portorriqueño Orlando Cruz se convirtió en el primer deportista de esta disciplina a nivel profesional en confesar su homosexualidad, rompiendo así un fuerte estereotipo históricamente instalado en ese ámbito.

El moreno, que representó a su país en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, admitió su condición en un comunicado de prensa en el que expresó: "Siempre he sido y seguiré siendo un orgulloso puertorriqueño. Siempre he sido y seguiré siendo un orgulloso hombre gay".

"No quiero esconder ninguna de mis identidades. Quiero que las personas me vean por el ser humano que soy", agregó en el texto Cruz, de 31 años y a quien apodan "El fenómeno".

El deportista, quien además agradeció a su familia, especialmente a su madre, a quien describió como su "inspiración y razón para vivir", señaló que quiere que la gente lo siga viendo por sus "destrezas en el boxeo, mi carácter y mi buena conducta deportiva".

"Quiero agradecer a mis amigos por su amor y apoyo. Y quiero también agradecer a mi equipo por creer en mí y apoyarme siempre, no tan solo en esta decisión sino a través de mi carrera", añadió.

Cruz, quien tiene marca de 18-2-1, incluyendo con nueve nocáuts, inició su carrera en el 2000. Actualmente, es campeón pluma (57 kilos) latino de la Organización Mundial de Boxeo.

Su próximo combate será el 19 de octubre, donde defenderá su corona frente al mexicano Jorge Pazos (20-4) en el Community Center del estado de Florida.