Rosario Bus, la única empresa privada del sistema local de transporte de pasajeros, pidió al Concejo que no se incremente el precio del boleto ya que considera que aumentar la tarifa derivaría en un descenso del número de pasajeros. En cambio, pidió analizar entre otras cosas los costos de administración de la tarjeta magnética.

Desde el municipio hace algún tiempo que vienen peleando la posibilidad de que la Nación otorgue un subsidio para poder hacer frente a los reclamos salariales de los choferes. En este marco, se difundió públicamente un estudio de costos que mostró un importante desfasaje en la tarifa y el mismo intendente aseguró que no podía descartarse un aumento de tarifas si el reclamo el gobierno central no era respondido.

En una carta, la empresa Rosario Bus solicitó que no se aumente la tarifa actual de 1,60. Osvaldo Miatello, integrante de la comisión de Transporte del Concejo, detalló en Radio 2: "La empresa Rosario Bus, que tiene alrededor de la mitad de la flota de ómnibus de Rosario, plantea que un aumento del boleto provocaría una disminución de los pasajeros transportados, de manera que no es partidaria del subir el precio del boleto".

El edil sostuvo que la compañía "plantea alternativas como la eliminación del derecho de fiscalización, la disminución de lo que cobra el Banco Municipal por la administración de la tarjeta magnéticas y la posibilidad de un coseguro para los pasajeros que tienen franquicias".

"Lo que llama la atención es que plantea que un aumento sería nocivo para las finanzas de las propias empresas", conlcuyó.