Para los que se quejaban de la pantalla de 14 pulgadas, llegó el de 20, para los que todavía refunfuñaban llegó el de 29. Pero ahora, una empresa japonesa que fabrica la marca Panasonic piensa ir mucho más allá: la compañía Matsushita planea poner el año que viene en el mercado televisores de plasma de 103 pulgadas. Sí, 103 pulgadas.     

 

Con un ancho de 2,4 metros y un alto de 1,4 metro y un peso de 215 kilos, la pantalla de 103 pulgadas  será un poco más grande que un colchón matrimonial y casi tan pesada como un piano.

 

¿El precio? Todavía no está confirmado pero si el televisión más grande hasta el momento en Japón (65 pulgadas) se vende a 7.500 dólares es probable que esa cifra se duplique. Es decir, no será para cualquiera.

 

Aunque exagerado, el proyecto tiene un antecedente cercano: una empresa surcoreana desarrolló un modelo de 102 pulgadas, aunque todavía no lo puso a la venta.