El cruce de acusaciones continúa. La mujer de 54 años que se quiso casar con un anciano de 87, que está ciego e internado en el Pami II y cuya hija impidió la boba, dijo que volverá a intentar que se concrete el matrimonio y que su cariño hacia el hombre es sincero.

“Me quiero casar con Nicolás para sacarlo de la mano de la hija, que no trata bien”, sostuvo Mariela Martínez en diálogo con Canal 3.

Y luego habló de su amor al anciano, aunque usó la primera personal, lo que de alguna manera no sólo la incluye a ella. “Nosotros lo queremos a Nicolás”, afirmó. La hija del hombre había denunciado que la mujer y el apoderado del anciano quieren quedarse con su pensión.

Mariela, en cambio, sostiene que la hija no cuida a Nicolás y que por eso, pese a que el martes pasado había salido del sanatorio, al día siguiente tuvo que ser internado. Y fue más allá: “Quiero que viva conmigo, para disfrutar sus últimos días de vida. Comingo va a poder vivir 5-10 años más, con la hija no”.

Según Mariela, el propio Nicolás había decidido no avisarle a la hija del casamiento y dijo que le había dado los documentos para que se pudiera concretar la boda. También contó que él ya vivía con el hombre, pero que las hijas la sacaron.