Una quema de pastizales registrada cerca de las siete de la tarde de este lunes, en la autopista a Santa Fe, entre el kilómetro uno y el tres, obligó a la concesionaria de la vía, Aufé, a impedir el paso por el lugar y desviar el tránsito.

Carlos Stiffel, vocero de la empresa explicó que ante el caso, “solicitamos la asistencia de Bomberos y de la Policía que en minutos apagaron el fuego y nos permitieron retomar la circulación normal en unos cuarenta minutos”.

Alertada sobre la presencia de fuego y la consecuente dificultad en la visión de los automovilistas, Ausfé decidió detener el tráfico que venía de la capital provincial. Mientras tanto, en Rosario personal de la comisaría 34ª desviaban los autos por caminos alternativos.

A sólo diez días del múltiple choque que dejó el saldo de cinco muertos y decenas de heridos en el camino a Buenos Aires, cuando la autopista se plagó de humo y neblina, la concesionaria actuó de forma correcta, opuesta a la asumida por la concesionaria de la autopista mencionada

“No hubo inconvenientes este lunes, notamos una mayor sensibilidad con la niebla y el humo, un cambio de comportamiento en la prudencia del usuario, los días de niebla baja la velocidad, respeta el carril y las luces encendidas”, comentó Stiffel.

“Intentamos hacer lo posible por advertir a los conductores, a veces no podemos por falta de medios. Por ejemplo en la entrada a Buenos Aires y Rosario, necesitamos de la policía pero donde tenemos estaciones de peaje, le decimos a la gente que no puede seguir y que debe esperar hasta que se disipe la neblina”, aseguró.