Para el amor no hay lugar ni marco poco propicio. El Old Trafford y un encuentro por cuartos de final de la Champions League también pueden ser el escenario elegidido para los besos y los abrazos. Al menos, así lo entendieron Diego Maradona y su novia Rocío Oliva.
El Diez y la joven futbolista de River ocuparon un palco en el mítico estadio este martes y, si bien siguieron parte del encuentro, el resto de partido poco les importó
Las cámaras de los fotógrafos presentes, e incluso de algunas señales deportivas, fueron testigo del fogoso romance que, tras la imagen con Cristiano Ronaldo, se hizo cada vez más público.