Comenzó la nueva edición de “Cantando por un sueño”, el certamen de canto del programa televisivo ShowMatch.
Los primeros en entrar al estudio fueron Patricia Sosa, Lucho Avilés, Oscar Mediavilla y Valeria Lynch, el jurado de este concurso.

La primera pareja que hizo presencia en el escenario fue la de Georgina Barbarrosa y Rodrigo Galván (que representa al jardín Albergue de Sueño, donde concurren niños de familias cadenciadas). Dispuesta a pisar fuerte desde el principio, la actriz bromeó con Marcelo Tinelli sobre un supuesto romance trunco entre ambos.

"Rock del gato", de los Ratones paranoicos fue el tema elegido por Barbarrosa – Galván para inaugurar la competencia. Patricia Sosa lo alabó (9), mientras que Oscar Mediavilla se mostró un poco molesto por el histrionismo de la pareja (7), Lucho Avilés (7) y Valeria Lynch, con el voto secreto, también se mostró satisfecha.

Pero sin duda la revelación llegó de la mano de Miguel “Tití” Fernández y Micaela Salinas (sanjuanina, quiere reconstruir la casa de su tío Hugo que vive en la cañada y que quedó destruida por el granizo y las inundaciones) fueron la segunda pareja, que se animaron con “New York, New York.”

El periodista dejó a todos con la boca abierta y se lució aunque su compañera lo sostuvo bastante bien. Lo cierto es que consiguieron nada menos que 25 puntos. Luego pasaron Brenda Gandini - Francisco Cracogna (su sueño es conseguir un salón para chicos retrasados mentales).

Esta vez el tema elegido fue “Nada es para siempre”, de Fabiana Cantilo. La hija de Daniela Cardone hizo lo suyo con bastante inseguridad y tuvo su costo, apenas consiguieron 18 puntos.

Karina Jelinek - Emiliano Rombola (el soñador compite por el equipamiento para la sala de terapia intensiva de pediatría del Instituto del Quemado) fueron los siguientes, con “La fuerza del engaño”.

Patricia Sosa arrancó diciendo que Jelinek había parecido “una mexicana mimosa” cuando debía tener una actitud más alegre, Mediavilla fue aun más duro, Avilés inesperadamente les regaló un 7.

La quinta pareja fue Roberto Piazza y María Soledad Fernández de la ciudad de Rosario (ella busca conseguir un lugar físico para El Hogar de Raquel, de madres solteras). No estuvieron mal, considerando que superaron la desafinación con presencia.

Adriana Aguirre y Mauricio Alvez (el soñador ayudará a sus abuelos a reencontrarse luego de 12 años con su familia uruguaya), que se alzaron con tan solo 16 puntos.

Fabián Schultz y Erika Rodríguez (el sueñote la uruguaya es construir un banco de leche materna para bebés prematuros) fueron la última pareja de la noche. Dejaron mucho que desear pero se llevaron buen puntaje.

Sin embargo Patricia Sosa les dedicó una desmedida y entusiasta evaluación (que acompañó en menor medida el resto del jurado) y en un acto de justicia la dupla se llevó apenas 22 puntos.