Micaela J. es una mujer rosarina que sufre violencia de género desde 2015. Lleva consigo un botón de pánico y consiguió contra su agresor una restricción de acercamiento pero su ex no le hace caso. La difama con pasacalles y panfletos. Por Facebook publica amenazas que después cumple. Le estropeó la fachada de su casa con pintura y le arruinó el auto a su hermano con ácido. Prometió hacer lo mismo con su cara. Micaela está desesperada.

En contacto con el periodista Juan Cruz Funes de El Tres, Micaela contó de las 12 denuncias que ya lleva acumuladas contra su agresor, Nahuel B. y de la indiferencia de la Justicia. “Quiero preguntarle a los fiscales, ¿dónde está el Estado? ¿Qué esperan? La situación no da para más”, dijo con la voz entrecortada.

Este domingo apareció colgado un pasacalle en una vivienda sobre 27 de Febrero con una foto trucada de Micaela en la que se la ve desnuda. En el texto la tildan de “corrupta” y drogadicta.

Según contó, las agresiones de B. comenzaron en 2015 pero Micaela no habría sido su única víctima. De acuerdo a lo señalado por Fernanda Serna de la Asociación de Defensa a las Mujeres (Ademur), en 2012 este hombre habría agredido también a su anterior pareja con los mismos métodos: amenazas y ácido. En octubre de ese año, incluso, su nombre apareció en una crónica policial del diario La Capital tras ser brutalmente golpeado por policías, acusado de haber vertido un líquido corrosivo en el auto de una amiga de su ex mujer.