Acorralado por el escándalo de corrupción que lo dejó al borde del juicio político, el presidente de Brasil, Michel Temer, dio un breve mensaje en el que aseguró que no renunciará a su cargo.

El mandatario brasileño dijo que se someterá a la investigación que lleva adelante el Tribunal Supremo de ese país. "No renunciaré, mi compromiso es con Brasil", aseguró.

En otro tramo de su discurso remarcó: "No compré el silencio de nadie" y recordó: "Este gobierno vivió esta semana su mejor y su peor momento".

Mientras tanto, los rumores sobre su futuro crecieron entre los diputados de la oposición.

El miércoles por la noche se divulgó la existencia de una grabación en la que Temer aparece avalando el pago de coimas. "Estoy viviendo el peor momento de mi vida", habría afirmado el presidente a su círculo íntimo. Y crecían los rumores de un discurso público inminente del mandatario.

Luego de que circulara el dato sobre la grabación, y en medio del escándalo, el mandatario sólo se refirió a las actividades del Gobierno y del Parlamento las cuales seguirían su normal funcionamiento. Sin embargo, tras los allanamientos que realizó la Policía Federal de Brasil esta mañana en busca de documentación vinculada con el pago de coimas, la presidencia de Brasil suspendió toda la agenda para el día de la fecha.

La actitud del Gobierno despertó rumores de todo tipo en el resto de las fuerzas políticas brasileñas. Según trascendió, Temer podría pronunciarse públicamente al mediodía. Anoche, cuando estalló el nuevo escándalo hubo cacerolazos y protestas contra Temer en San Pablo y las demás ciudades importantes de Brasil. Se esperaban nuevas manifestaciones de quienes reclaman que el presidente abandone su cargo.

Según medios locales, el presidente confirmó que “vivía el peor momento de su vida”, mensaje que habría transmitido a sus colaboradores más cercanos. Los motivos por los cuales la casa de gobierno decidió suspender todas las actividades no fueron comunicados, algo que aumentó la incertidumbre.

Por la mañana, el escándalo de las grabaciones creció exponencialmente, incluyendo allanamientos y detenidos. Varios de los domicilios allanados pertenecen a Aécio Neves, titular del Partido Socialdemócrata de Brasil, quien perdió en las presidenciales de 2014 contra Dilma Rousseff.

La Corte Suprema ordenó que se separe a Neves, aliado clave de Temer, de su cargo de senador. Andrea Neves, su hermana, ya fue detenida por orden del juez del máximo tribuna Edson Fachin.

El Tribunal Supremo de Brasil suspendió en su cargo al diputado Rodrigo Louras Rocha, uno de los protagonistas del escándalo de corrupción que tiene en jaque a Temer. El cerco de la investigación se cierra cada vez más sobre el presidente brasileño.