Nada como un entorno verde y libre de smog. Acto seguido, una pareja montó un invernadero en el municipio madrileño de Aranjuez. Sólo que los dueños de casa no cultivaron gardenias, sino que acumularon un total 1071 plantas de marihuana que fueron desmanteladas por la policía ibérica.

Además de la pareja, otras dos personas fueron detenidas acusadas de mantener la plantación y vender la resultante a una tienda del centro de Madrid, informó The Huffinton Post.

La investigación comenzó cuando los agentes se percataron que el departamento en el que residían un hombre y su novia, ambos de nacionalidad colombiana, era visitado por numerosas personas a lo largo del día.

Tras establecer un dispositivo de vigilancia, los agentes ingresaron a la vivienda y descubrieron la plantación de cannabis sativa y una caja que contenía un gran número de cogollos de marihuana.

Las plantas estaban en diferentes habitaciones de la vivienda, en la que había lámparas de calor de gran potencia, un humificador y material de invernadero como abonos, fertilizantes y numerosas telas térmicas.