Una inesperada lluvia se desató este mediodía en la zona central del país. Si bien el pronóstico del tiempo anunciaba lluvias recién para el viernes en la zona, al parecer el fenómeno se adelantó y golpeó con fuerza la zona de Santa Fe y alrededores.

Pero antes de comenzar a llover, una granizada breve sorprendió a los santafesinos de algunos barrios, como Guadalupe, donde cayeron piedras de tamaño pequeño que formaron un colchón de 1 centímetro de espesor.

También se registró un fenómeno similar en la zona de Colastiné, sobre la ruta provincial N° 1, aunque circunscripto exclusivamente a un sector de la ruta, donde una franja del campo se cubrió momentáneamente de granizo diminuto.

En Rosario, mientras tanto, no hubo granizo pero sí fuertes chaparrones. Sin embargo, hacia la tarde el cielo se había abierto.