Después de las inusuales lluvias de fines de marzo que inundaron buena parte de la ciudad y la región, el meteorólogo Oscar Monjelat preparó un mapa de “fenómenos con alta probabilidad de ocurrencia”.

Allí enumera para la zona de Rosario y Santa Fe: tormentas eléctricas, vientos muy fuertes, chaparrones intensos o lluvias convectivas, nieblas, granizadas severas y tornados.

Las consecuencias, según adelantó, van desde la “muerte por impacto de rayo” o por una granizada de grandes características, hasta daños menores como los típicos anegamientos, cortes de luz y caídas de ramas y cables.
La posibilidad de que se dé de una u otra forma responde a la intensidad de los fenómenos, característica que según los últimos cálculos que Monjelat señaló a Rosario3.com se intensificaría en el verano.

Advertencia que no se hace para generar un pánico que sirve de poco sino para fomentar la conciencia, la cautela y la autoprotección de las personas (además de fomentar políticas de prevención de las autoridades, claro).