Verdaderos profesionales del hurto. Tres delincuentes protagonizaron un robo con inhibidor de señal de un auto, cuyo conductor se bajó con su hijo en brazos e ingresó a un local, y todo el operativo quedó grabado con dos cámaras de seguridad este viernes a la tarde en bulevar Rondeau al 300.
El informe que presentó el periodista Hernán Funes en Telenoche (El Tres) permite apreciar -si cabe el verbo- el paso a paso para concretar el robo de, en este caso, una mochila del interior de un vehículo.
La secuencia es la siguiente. El auto blanco conducido por la futura víctima sube a la vereda. Allí se baja el conductor y saca a su hijo pequeño en brazos. Camina hacia el interior del comercio y gira para aplicar el cierre automático con el control remoto.
De fondo siempre se ve a otro vehículo claro, un Renault Logan, que retrocede lento, como si buscara un lugar para estacionar. En realidad, sus ocupantes están esperando el momento para que el inhibidor neutralice la señal del control de la víctima y dejar el auto abierto.
Cuando el joven ingresa con su hijo al local, la banda se despliega. El conductor permanece en el Logan, un segundo hace de campaña y se dirige al interior del comercio y un tercero ejecuta el hurto: abre la puerta de auto y saca una mochila.
Lo que ocurre adentro del negocio también quedó registrado, por una segunda cámara de seguridad. El ladrón que hace de campana finge interés en algún producto y cuando el robo se concreta se va. Tal es la impunidad y el golpe silencioso que pasa delante de tres policías, quienes no advierten ninguna irregularidad.
“Vi el auto que se me pegó atrás, un Logan nuevo, pero nunca imaginé lo que iban a hacer. Dí media vuelta y cerré con la llave”, relató la víctima a El Tres, quien dijo que no percibió nada raro porque en general su auto “no hace muchas luces para verificar el cierre”.
El joven contó además que la mochila tenía artículos del bebé -ropa, pañales y otros elementos-, además de un celular de su mujer. “Nunca me di cuenta”, reconoció.
