Todos los reclusos que se estaban amotinados en el Penal de Varones de Santiago del Estero fueron reducidos este lunes a la tarde por la policía, que dio por controlada la revuelta, informaron fuentes de la fuerza.
Los presos de los pabellones 3, 5 y 6 fueron llevados al patio central del penal y la policía tomó el control de la unidad luego de los incidentes registrados a lo largo de la jornada, tras el motín e incendio en el que murieron al menos 33 presos.
Según informes forenses preliminares, todos los decesos fueron provocados por asfixia o quemaduras graves.
Por su parte, el juez a cargo de las investigaciones prometió que investigará "hasta las últimas consecuencias" del supuesto motín y posterior incendio en el penal de la ciudad de Santiago del Estero.
"Están todos muy bien de salud, he recorrido todo el penal y hablé con todos, esto es lo que ellos quieren que les diga", dijo el juez Ramón Tarchini frente a un tumulto de familiares de reclusos que a los gritos le exigieron "justicia" y garantías de que no habrá "más represión".
El fiscal que lleva adelante la investigación, Cristian Vittar, confirmó que 33 reclusos murieron en la tragedia ocurrida al anochecer del domingo y fuentes policiales cifraron en una treintena los heridos, de los cuales nueve están en grave estado.
El Gobierno argentino anunció el envío de una comisión a Santiago del Estero para colaborar en la atención de los familiares de las víctimas.
Otras fuentes judiciales admitieron que el presidio, que albergaba a 480 reclusos, "es un edificio obsoleto" que "está al límite" de su capacidad, mientras que abogados de los presos afirmaron que el trato a los detenidos "es inhumano".
Tensión después de la tragedia
Los presos alojados en los pabellones 3, 5 y 6 del Penal de Varones de Santiago del Estero rompieron este mediodía los candados de sus celdas y salieron a un patio de la unidad para incrementar su reclamo, en tanto 80 efectivos de la Guardia de Infantería ingresaron al lugar para intentar controlarlos.
Fuentes judiciales y penitenciarias informaron a Télam que la situación volvió a descontrolarse y añadieron que aparentemente se sumaron a la revuelta detenidos de otros pabellones.
Los efectivos policiales, en tanto, comenzaron a reprimir a los reclusos con disparos de balas de goma -que se escuchan desde el exterior del penal- y con chorros de agua.
En un momento de la protesta este lunes, por una de las ventanas del penal se vieron llamas que provenían de un colchón y sábanas a las que los reclusos prendieron fuego y que fue apagado por una dotación de bomberos que permanece en el penal con extintores y tubos de oxígeno.
"No hay ningún tipo de represión desde la noche del domingo", cuando se sofocó el incendio que habían desatado los amotinados, afirmó Tarchini, luego de subrayar que están dadas "todas las garantías" para los reclusos.
El juez aseguró a los periodistas que está "todo tranquilo" dentro del penal, donde, según indicó, "la mayoría" de los reclusos está "bajo proceso o sin condena en firme".
"Espero que esta tranquilidad continúe", señaló en medio de los gritos de familiares que temen por la vida de los reclusos y movimientos de las fuerzas de seguridad que rodean al penal.
Fuente: Télam y EFE