La Organización de las Naciones Unidas (ONU) pidió a Inglaterra y Argentina que negocien por el conflicto de soberanía que existe sobre las islas Malvinas. Lo hizo a través de una resolución del Comité de Descolonización que se aprobó este jueves tras un discurso de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien reclamó eso mismo al Reino Unido: "Sólo les pedimos que se sienten a dialogar".

La mandataria participó de la reunión del Comité acompañada de una comitiva integrada por funcionarios de su gobierno y dirigentes de la oposición. El discurso incluyó una reivindicación del derecho de la Argentina sobre el territorio, críticas al referéndum convocado por los kelpers y contra el primer ministro británico, David Cameron.

La presentación de Cristina fue la primera que hace un presidente argentino en ese órgano internacional. Luego de la disertación de la mandataria, el Comité de Descolonización aprobó por consenso una resolución que pide a Argentina y el Reino Unido que reanuden "sus negociaciones a fin de encontrar a la mayor brevedad posible una solución pacífica, justa y duradera" para el conflicto de las Malvinas.

El texto, por el que el comité decide mantener a examen la cuestión, recalca que "la manera de poner fin a la especial y particular situación colonial en la cuestión de las Malvinas es la solución pacífica y negociada de la controversia sobre soberanía que existe entre los gobiernos de Argentina y del Reino Unido".

El discurso

En su discurso ante el comité de Naciones Unidas, la presidenta expresó: “No nos van a encontrar en Irak ni en Afganistán, sólo integramos misiones militares de paz", y preguntó "por qué no hacen un plebiscito" en esos dos países.

"Vamos a seguir cumpliendo las resoluciones de Naciones Unidas", añadió Cristina y manifestó que "el Reino Unido debería actuar con inteligencia porque una negociación permitiría asociaciones que podrían ser beneficiosas para América del Sur y el mundo".

La presidenta destacó que sólo restan resolver 16 cuestiones coloniales, diez de las cuales son originadas por territorios usurpados por el Reino Unido.

"No vengo sola, vengo acompañada por la mayoría de los partidos políticos de la República Argentina con representación parlamentaria, están acá duros opositores a mi gobierno, pero que sin embargo conciben a la cuestión Malvinas como una cuestión de Estado", añadió la mandataria.

También remarcó que Argentina apela a mecanismos de paz. "No queremos más muertes, no queremos más guerras, porque las hemos sufrido intenamente y externamente", afirmó, para luego remarcar que fue la dictadura la que "decidió inconsultamente los hechos del 2 de abril" de 1982.

"No les pedimos que digan que las Malvinas son argentinas. Sólo les pedimos que se sienten a dialogar. ¿Puede alguien en el mundo contemporáneo negarse a dialogar y luego querer convertirse en adalid de derechos humanos. La verdad que no", agregó.