Los médicos del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez dicen que lo que ocurrió este viernes por la mañana no fue una excepción, ya que cada vez son más las personas que acuden a la salud pública. Lo cierto es que esta mañana confluyeron en la guardia de la institución varios pacientes que protagonizaron accidentes y, por su delicado estado de salud, requerían internación en áreas de cuidados intensivos.

“El Heca dispone actualmente de 13 camas como máximo en terapia intensiva y sólo 8 en unidad coronaria", explicó la secretaria de Salud Pública municipal, Mónica Fein a Rosario3.com. "De modo que cuando la demanda supera esa cifra es necesario derivar los pacientes a otros efectores municipales o provinciales”, señaló.

El problema, según la funcionaria, se agudizó este viernes por la mañana debido a que los otros hospitales, como el Alberdi o el Centenario que habitualmente los auxilian cuando los excede la demanda, tampoco disponían de espacio físico para recibir nuevos pacientes.

“Si bien la situación mejoró pasado el mediodía, gracias a que se dieron algunas altas y se produjeron varias derivaciones –reconoció Fein–, se mantiene la dificultad para responder a la demanda de atención médica de máxima complejidad”.

La secretaria agregó que por año, se derivan desde el Heca al sector privado (con costo a cargo de la Municipalidad) alrededor de 150 pacientes que necesitan cuidados especiales y que por falta de espacio, no puede brindarle el hospital, a pesar de los recursos que maneja y la calidad de su personal.

El área de salud es la que absorbe el mayor porcentaje del presupuesto municipal (para este año será 27 por ciento) y “entre abril y mayo empezará a funcionar el nuevo Heca que tendrá una capacidad inicial de 18 camas en terapia intensiva, con perspectiva de llegar a una meta de 24”, dice Fein. Esto podría descomprimir la crítica situación por la que atraviesa la salud pública, siempre que la demanda no siga creciendo como hasta la fecha.

No se conocen cifras oficiales sobre la cantidad de personas que carecen de obra social en la región (ya que al Heca llegan pacientes no sólo de Rosario sino también de la zona de influencia) pero extraoficialmente se estima que ascienden a un 54 por ciento del total. Gran parte de esa población –reconocen los médicos que reproducen lo relatado por sus pacientes– hace 15 años tenían obra social y hasta prepaga y hoy no tienen nada más que el hospital público para atender su salud.