Los titulares de licencias y los choferes de taxi decidieron este jueves al mediodía, en asamblea, lanzar un paro por tiempo indeterminado que arrancará el próximo lunes a las 8. Más allá del rechazo a la posibilidad de que los concejales aprueben, a instancias del municipio, el pedido de 500 nuevas licencias adelantaron que su intención es mantener una reunión con Miguel Lifschitz. "Si se abren los canales de diálogo se puede destrabar la medida, depende del intendente", aseguró Mario Cesca de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti), tras la reunión que se realizó este jueves a la tarde.

Esa postura, que se lanzó de manera férrea al mediodía, a la tarde se flexibilizó tras una reunión que realizaron todos los sectores del rubro (entre titulares, peones, independientes y de radiollamadas) en donde se acordó una propuesta que, de ser atendida por el Ejecutivo antes del inicio de la medida podría destrabar el conflicto. Los dirigentes proponen en lugar de agregar nuevas licencias, lanzar un cronograma de cumplimiento para los fines de semana par-impar (es decir los días pares saldrían los coches con chapas pares) más la incorporación de choferes eventuales para cubrir la demanda nocturna.

Sin embargo, según precisó Mario Cesca a Rosario3.com, estas propuestas ya habían sido consensuadas por los partes “pero la decisión de agregar chapas cortó el diálogo”. Por otro lado, aseguró que pedirán a la Municipalidad que se revise todo el sistema de transporte (taxis, remises y colectivos) además de reclamar un aumento de la tarifa. Si ambos puntos no son atendidos, el paro no se levantaría.

Por su parte, la secretaria de Servicios Públicos de la Municipalidad, Clara García, adelantó a Radio 2 que –aunque se cuenta con esas herramientas– no se planea sancionar a los taxistas que se sumen al paro. “Apelamos a la responsabilidad en la prestación del servicio”, señaló la funcionaria, en diálogo con De tarde en tarde.  Además, aseguró que espera que el conflicto “se destrabe con la responsabilidad que tienen los 3 mil taxistas, no solo los cien que estuvieron frente al Concejo. No es correcto negar servicio a los vecinos”.

De todos modos, que “es complejo para el municipio saber quién está en la calle y quién no", señaló. "Por eso la oposición a la radio”, evaluó.

“Uno se pregunta por qué hacen una medida de fuerza cuando no hay mensaje mandado y hay dos reuniones previstas para el lunes y miércoles”, planteó García, quien sin embargo entendió que “durante 20 años hubo una cantidad cautiva de licencias” ante lo cual los taxistas ahora realizan “una defensa sectorial”. “Pero nuestra mirada no puede ser sectorial, los rosarinos hace tiempo que reclaman más servicios en la calle”, aseguró.

Una mañana agitada

"Si es por el ánimo de la gente el paro sigue y no para más", aseguraron los taxistas, que este jueves a la mañana, cerca de las 11, se reunieron frente al Palacio Vasallo. Estaban las entidades que agrupan a los titulares de licencias y también los choferes del Sindicato de Peones, que de todos modos no son tan terminantes en cuanto a su rechazo a que haya nuevas chapas ya que aceptarían esa posibilidad si surge de un estudio en el que participen todos los sectores y que involucre también al sistema de colectivos. Ante esa medida, el servicio de taxis estaba reducido y el tránsito en el centro muy complicado.

La protesta, por cierto, fue mucho más tranquila que lo esperado. De hecho, un grupo de representantes de titulares y choferes se reunió con un grupo de ediles y allí plantearon una alternativa para evitar que haya más chapas y al mismo tiempo mejorar el servicio, sobre todo fines de semana y durante la noche: aceptar que cada coche trabaje al menos dos turnos por día.

El vocero de esta postura fue Boix, quien -en diálogo con De 12 a 14- a la salida de la reunión admitió que los taxistas deben hacer "un mea culpa" ya que fueron ellos mismos quienes, cuando el municipio quiso imponer los dos turnos obligatorios, hicieron una presentación en la Justicia que luego, mediante una cautelar, frenó la implementación de la medida.

Boix dijo que ahora "hay consenso" en el sector para trabajar doble turno, aunque volvió a plantear que para que se resuelva el problema del servicio nocturno hay que resolver la cuestión seguridad.

El dirigente agregó que si se suman más chapas eso afectará el salario de los choferes y que ese es motivo de su sector a la medida.

En tanto, en una reunión realizada este miércoles por la tarde, representantes del SIndicato de Peones de Taxi, de Catiltar y de taxistas independientes (ATI) tomaron conjuntamente la decisión de marchar al Concejo y adelantaron al móvil de Radio 2 que pedirán a los concejales que discutan “todo el sistema de transporte público de la ciudad” porque no consideran razonable que se los culpe de algo que los excede y señalaron que la iniciativa de otorgar más chapas juega en contra de los salarios de los peones.

"Les haremos observar a los concejales que estamos desacuerdo con esta medida intempestiva e inconsulta. Había una mesa de trabajo y se la desconoció. Es una falta de respeto, por eso rechazaremos la medida", adelantó Mario Cesca, de ATI. "Queremos que se debata definivamente el tema del transmporte: colectivos, taxis y remises. Si esta discusión no se da en ese marco esta medida es una maniobra especulativa del poder ejecutivo, que no va a resolver de esta manera el problema a los usuarios", advirtió.

El quid de la cuestión

El municipio elevó un informe al Concejo establece que al haberse visto frustradas las iniciativas de que cada unidad trabajara un mínimo de 16 horas de manera y de que todos contaran con un sistema de radiotaxis, la conclusión de sumar unidades para prestar el servicio se presenta como la última alternativa posible para las 150 mil personas que aproximadamente lo utilizan diariamente.

Según el relevamiento del municipio en Rosario hay 3.123 licencias distribuidas entre 2.723 titulares. Hay más de 44 que tienen 3 licencias cada uno y además, hasta hay un rosarino que es propietario de unas ocho chapas. Sin embargo, el servicio no para de sumar quejas y parece ser que de cara a las fiestas de fin de año –Navidad y Año Nueno– donde el servicio se resiente notablemente, el ejecutivo municipal quiere estar prevenido.

En este sentido, el informe elaborado por la Dirección General de Transporte de la Secretaría de Servicios Públicos ya está en el Palacio Vasallo y los concejales serán quienes tendrán que elaborar el proyecto que se traduzca en el aumento de taxis en la calle para cubrir con la actual demanda.